El ser humano viene provisto de serie con grandes virtudes, con el marchamo innato de la maravillosa ignorancia infantil y el paulatino crecimiento personal. No son pocos los falsos ascetas que apuntan a que toda persona nace con la maldad
Universos para lelos
De vez en cuando, y sin afanarme demasiado en las pretensiones, me gusta sentarme en el balcón de los pacientes para ver pasar la vida de los demás, la vida que también pasa irremediablemente para mí, dejándome muchas canas y